El problema de la falta de instalaciones para el tratamiento de los residuos sólidos urbanos en la Comunidad Valenciana, por el retraso en su construcción en unos casos o por decisiones judiciales en otro, pone en evidencia la mala gestión de la Conselleria de Medi Ambient. A la situación de emergencia que crea el cierre, total o parcial, del vertedero de Dos Aguas se une el retraso en la construcción de las instalaciones de Cervera i La Vall d’Uixó en Castelló y la de Llanera y L’Horta en Valencia.
El macrovertedero de Dos Aguas, dedicado fundamentalmente a albergar los residuos de la ciudad de Valencia y la comarca de l’Horta, no debería haberse construido y no debería haberse construido allí. Su impacto sobre la cuenca del Xúquer y diversas irregularidades hacían prever, desde hace tiempo, que la justicia podría acabar decretando su cierre, pero la Conselleria de Medio Ambiente no ha previsto una salida a esta situación. Quizá es que prefiere que “cuanto peor mejor” y justificar así la necesidad de las incineradoras. La Alcaldesa de Valencia se ha ofrecido a construir una incineradora en su término municipal. Este ofrecimiento tiene la virtud de aceptar que Valencia ha de resolver su problema con las basuras y no trasladarlo a los pueblos vecinos, en el caso de las plantas de tratamiento o a casi 100 Km. en el caso del vertedero de Dos Aguas. Pero el ofrecimiento tiene poca credibilidad cuando el Ayuntamiento que dirige es incapaz de poner a disposición de los vecinos unos sencillos ecoparques.
Mientras Valencia y L’Horta (Plan Zonal III y VIII, Area de Gestion 1) buscan soluciones definitivas en su territorio como nuevos vertederos y la construcción de las dos plantas de tratamiento en Manises y Quart de Poblet y Aldaia, no pueden enviar la basura a otros sitios de cualquier manera. El tratamiento que se hace en la nueva planta del EMTRE en Quart de Poblet es muy deficiente, no trata la totalidad de los RSU recogidos como es bien sabido, y su rechazo no puede ir directamente a vertedero como hasta ahora, debe pasar por planta nuevamente. Con esta acción se conseguiría recuperar el máximo posible de materiales alargando la vida y la calidad de los vertederos. Es más están obligados a realizar el esfuerzo, previsto en la Ley Valenciana de Residuos, en el Plan Zonal y en la Directiva europea, de separar la materia orgánica del resto de residuos para facilitar un mejor reciclaje. Esto implicaría que los vecinos dispusieran en la calle de un contenedor para la materia orgánica y otro para el resto (además de los de papel-cartón, vidrio y envases). Donde actualmente hay dos contenedores verdes bastaría con cambiar la tapa a uno de ellos.
Las plantas de tratamiento de los RSU que funcionan en la actualidad en nuestro territorio tienen un rendimiento muy bajo, prácticamente ninguna cumple el 40% de máximo legal de rechazo al vertedero y todas superan el 60 o 70%. Los vertederos se llenan rápidamente y hay que construir nuevos con los problemas económicos y ambientales que eso crea.
Por otro lado no se han llevado a cabo las campañas de sensibilización y información ciudadana previstas en la Ley de Residuos y el los Planes Zonales para conseguir mayores niveles de reciclaje.
Con estas dos acciones, llegar al máximo del 40% de rechazo al vertedero, y las campañas de concienciación, se conseguiría reducir a la mitad los residuos que hoy llenan en pocos años los vertederos.
Las crisis, y en este momento la de las basuras lo es, son también una oportunidad. No hemos de preguntar donde tiramos ahora la basura sino como lo hacemos mejor de lo que lo hemos hecho hasta ahora, para disminuir su impacto ambiental y superar la crisis fiscal del actual modelo de gestión. La Conselleria debe asumir sus responsabilidades como principal administración implicada y en particular debe hacer posible que cada Consorcio, cada Plan Zonal, resuelva el tratamiento de las basuras en su territorio, con la capacidad legal que se les ha concedido.
Pedimos que cumplan la Ley y las normas que la misma Conselleria ha aprobado:
Que se separe en origen la materia orgánica
Que se lleven a cabo las campañas de información ciudadana
Que se cumplan los porcentajes máximos de rechazo que va al vertedero.
Subsanar los errores de la propia Conselleria como situar el emplazamiento de las instalaciones de La Vall d’Uixó en un lugar reserva de suelo para el trasvase.
El macrovertedero de Dos Aguas, dedicado fundamentalmente a albergar los residuos de la ciudad de Valencia y la comarca de l’Horta, no debería haberse construido y no debería haberse construido allí. Su impacto sobre la cuenca del Xúquer y diversas irregularidades hacían prever, desde hace tiempo, que la justicia podría acabar decretando su cierre, pero la Conselleria de Medio Ambiente no ha previsto una salida a esta situación. Quizá es que prefiere que “cuanto peor mejor” y justificar así la necesidad de las incineradoras. La Alcaldesa de Valencia se ha ofrecido a construir una incineradora en su término municipal. Este ofrecimiento tiene la virtud de aceptar que Valencia ha de resolver su problema con las basuras y no trasladarlo a los pueblos vecinos, en el caso de las plantas de tratamiento o a casi 100 Km. en el caso del vertedero de Dos Aguas. Pero el ofrecimiento tiene poca credibilidad cuando el Ayuntamiento que dirige es incapaz de poner a disposición de los vecinos unos sencillos ecoparques.
Mientras Valencia y L’Horta (Plan Zonal III y VIII, Area de Gestion 1) buscan soluciones definitivas en su territorio como nuevos vertederos y la construcción de las dos plantas de tratamiento en Manises y Quart de Poblet y Aldaia, no pueden enviar la basura a otros sitios de cualquier manera. El tratamiento que se hace en la nueva planta del EMTRE en Quart de Poblet es muy deficiente, no trata la totalidad de los RSU recogidos como es bien sabido, y su rechazo no puede ir directamente a vertedero como hasta ahora, debe pasar por planta nuevamente. Con esta acción se conseguiría recuperar el máximo posible de materiales alargando la vida y la calidad de los vertederos. Es más están obligados a realizar el esfuerzo, previsto en la Ley Valenciana de Residuos, en el Plan Zonal y en la Directiva europea, de separar la materia orgánica del resto de residuos para facilitar un mejor reciclaje. Esto implicaría que los vecinos dispusieran en la calle de un contenedor para la materia orgánica y otro para el resto (además de los de papel-cartón, vidrio y envases). Donde actualmente hay dos contenedores verdes bastaría con cambiar la tapa a uno de ellos.
Las plantas de tratamiento de los RSU que funcionan en la actualidad en nuestro territorio tienen un rendimiento muy bajo, prácticamente ninguna cumple el 40% de máximo legal de rechazo al vertedero y todas superan el 60 o 70%. Los vertederos se llenan rápidamente y hay que construir nuevos con los problemas económicos y ambientales que eso crea.
Por otro lado no se han llevado a cabo las campañas de sensibilización y información ciudadana previstas en la Ley de Residuos y el los Planes Zonales para conseguir mayores niveles de reciclaje.
Con estas dos acciones, llegar al máximo del 40% de rechazo al vertedero, y las campañas de concienciación, se conseguiría reducir a la mitad los residuos que hoy llenan en pocos años los vertederos.
Las crisis, y en este momento la de las basuras lo es, son también una oportunidad. No hemos de preguntar donde tiramos ahora la basura sino como lo hacemos mejor de lo que lo hemos hecho hasta ahora, para disminuir su impacto ambiental y superar la crisis fiscal del actual modelo de gestión. La Conselleria debe asumir sus responsabilidades como principal administración implicada y en particular debe hacer posible que cada Consorcio, cada Plan Zonal, resuelva el tratamiento de las basuras en su territorio, con la capacidad legal que se les ha concedido.
Pedimos que cumplan la Ley y las normas que la misma Conselleria ha aprobado:
Que se separe en origen la materia orgánica
Que se lleven a cabo las campañas de información ciudadana
Que se cumplan los porcentajes máximos de rechazo que va al vertedero.
Subsanar los errores de la propia Conselleria como situar el emplazamiento de las instalaciones de La Vall d’Uixó en un lugar reserva de suelo para el trasvase.
Firmado:
Miquel Aguilar Acció Ecologista-Agró
Pep de la Rubia Ecologistes en Acció
Paco Gonzalez Gecen
Miquel Aguilar Acció Ecologista-Agró
Pep de la Rubia Ecologistes en Acció
Paco Gonzalez Gecen
