NOTA DE PRENSA
28 de enero de 2010
La tragedia de Haití - una cuestión de justicia social -
La tragedia acaecida en Haití con decenas de miles de personas muertas, otras tantas heridas y mutiladas y el País entero sumido en la mayor de las pobrezas y necesidades básicas, nos está acompañando informativamente durante estos días y nos llama desgarradamente a la colaboración y a la solidaridad imprescindible, no es solo una cuestión humanitaria, es una cuestión de justicia social para denunciar que el desarrollo de algunos países ricos no se puede construir sobre la base del subdesarrollo y la explotación de otros.
Es necesaria la ayuda para paliar los efectos devastadores del terremoto y desde CCOO PV así lo haremos a través de nuestra Fundación “Paz y Solidaridad” y la red de fundaciones que hay a lo largo del Estado, pero se impone una reflexión:
Las condiciones de los pueblos denominados del Sur son, en circunstancias cotidianas de desolación y pobreza injusta, producto de un sistema económico y político internacional que permite que el 80% de la riqueza mundial, solo sea disfrutado por el 20% de la población y esta situación tiene consecuencias en todos los órdenes de la vida.
Es cierto que Haití se encuentra enclavada en una zona geológicamente inestable, el cinturón de fuego del Pacífico, pero no es menos cierto que otros países como Japón, también lo están y los efectos de cualquiera movimiento sísmico están paliados por una inversión adecuada en las construcciones que minoran la situación de riesgo. Ningún organismo internacional se ha preocupado por la creación de una infraestructura adecuada que resista los asaltos de la naturaleza en el país más pobre de América.
La ayuda al desarrollo cobra más sentido en estos momentos en los que los sentimientos de solidaridad se han despertado horrorizados por las imágenes que contemplamos a diario.
Desde CCOOPV nos afianzamos en nuestro compromiso con los trabajadores y las trabajadoras de las zonas deprimidas y además de reforzar la ayuda al desarrollo a través de nuestra Fundación Paz y Solidaridad, continuaremos denunciando el recorte presupuestario de ayuda al desarrollo por parte del Gobierno valenciano y presionando a la Administración para que sea considerada como una obligación de justicia social.
Los terremotos asolan sin avisar pero es la comunidad internacional la que tiene la obligación de colaborar con los países que viven situaciones de extrema pobreza, para desarrollar infraestructuras que les permitan vivir con dignidad y enfrentarse a estos desastres naturales con recursos.
Vanesa Casado Montalt. Responsable de Políticas Sociales de CC OO PV de Camp de Morvedre y Alto Palancia.
28 de enero de 2010
La tragedia de Haití - una cuestión de justicia social -
La tragedia acaecida en Haití con decenas de miles de personas muertas, otras tantas heridas y mutiladas y el País entero sumido en la mayor de las pobrezas y necesidades básicas, nos está acompañando informativamente durante estos días y nos llama desgarradamente a la colaboración y a la solidaridad imprescindible, no es solo una cuestión humanitaria, es una cuestión de justicia social para denunciar que el desarrollo de algunos países ricos no se puede construir sobre la base del subdesarrollo y la explotación de otros.
Es necesaria la ayuda para paliar los efectos devastadores del terremoto y desde CCOO PV así lo haremos a través de nuestra Fundación “Paz y Solidaridad” y la red de fundaciones que hay a lo largo del Estado, pero se impone una reflexión:
Las condiciones de los pueblos denominados del Sur son, en circunstancias cotidianas de desolación y pobreza injusta, producto de un sistema económico y político internacional que permite que el 80% de la riqueza mundial, solo sea disfrutado por el 20% de la población y esta situación tiene consecuencias en todos los órdenes de la vida.
Es cierto que Haití se encuentra enclavada en una zona geológicamente inestable, el cinturón de fuego del Pacífico, pero no es menos cierto que otros países como Japón, también lo están y los efectos de cualquiera movimiento sísmico están paliados por una inversión adecuada en las construcciones que minoran la situación de riesgo. Ningún organismo internacional se ha preocupado por la creación de una infraestructura adecuada que resista los asaltos de la naturaleza en el país más pobre de América.
La ayuda al desarrollo cobra más sentido en estos momentos en los que los sentimientos de solidaridad se han despertado horrorizados por las imágenes que contemplamos a diario.
Desde CCOOPV nos afianzamos en nuestro compromiso con los trabajadores y las trabajadoras de las zonas deprimidas y además de reforzar la ayuda al desarrollo a través de nuestra Fundación Paz y Solidaridad, continuaremos denunciando el recorte presupuestario de ayuda al desarrollo por parte del Gobierno valenciano y presionando a la Administración para que sea considerada como una obligación de justicia social.
Los terremotos asolan sin avisar pero es la comunidad internacional la que tiene la obligación de colaborar con los países que viven situaciones de extrema pobreza, para desarrollar infraestructuras que les permitan vivir con dignidad y enfrentarse a estos desastres naturales con recursos.
Vanesa Casado Montalt. Responsable de Políticas Sociales de CC OO PV de Camp de Morvedre y Alto Palancia.
