Los últimos datos que publicó el Ministerio de Empleo y Seguridad Social sobre el número de huelgas llevadas a cabo en el último año en el conjunto del Estado Español, reflejaban datos muy significativos, que hacían hincapié en la disminución drástica, sobre todo respecto a los años más acentuados de crisis, es decir 2008-2009-2010, de las huelgas en este País. Este hecho da pie a hacerse algunas preguntas: ¿qué pasa? ¿Por qué se reduce el conflicto y las movilizaciones? ¿Acaso hemos conseguido el pleno empleo y unas condiciones laborales dignas para el conjunto del trabajadores/as y la población en general? , ¿Acaso se ha terminado con los desahucios? ¿Influyen en nuestras consciencias y forma de actuar el discurso oficial que nos habla del crecimiento del PIB y de la salida de la crisis? ¿Nos atenaza y genera miedo normativas como la Ley Mordaza o simplemente estamos siendo domesticados, asumiendo que vivimos en el mejor de los mundos posibles a pesar del paro, la precariedad o la acumulación de riqueza de unos pocos? ¿Tras el 15M y la llegada a las instituciones de PODEMOS se pensó que solo desde ese marco se podían cambiar las realidades? Estas y otras preguntas requieren una reflexión de aquella izquierda que pretende superar un modelo económico y social depredador como es el Capitalismo.

 

Si adaptamos a Gramsci a día de hoy diríamos que las clases dominantes a través del Estado pretenden crear “voluntades conformistas, capaces de absorber a toda la sociedad, asimilándola a su nivel cultural y económico, convirtiéndose el Estado en educador”. Así es, han conseguido unas veces con el miedo otras con las carencias y errores de la izquierda – fuerzas políticas, sociales y sindicales - , que el gusto cultural de masas y el consenso pasivo se instale en la sociedad.

 

Aquellos que nos reclamamos de la izquierda comunista sabemos que únicamente alcanzando las instituciones no se transforma la sociedad. Si la sociedad, la clase trabajadora, no asume otras políticas y valores que permitan que cuando se llegue a las instituciones no solo se alcance el gobierno sino también el poder. Para ello hay que tener claro el proyecto, el modelo de sociedad alternativo que se quiere, el programa y los valores que los sustentan. Todo ello aderezado con la agitación permanente de las conciencias y la movilización que permita desterrar las conciencias tranquilas y sumisas que el propio sistema genera.

 

Decía Lenin, ahora que se cumple el aniversario de la revolución de octubre, que no hay práctica revolucionaria sin teoría revolucionaria. Yo diría que las acciones que se lleven a cabo en nombre de un fin requieren que los medios empleados estén orientados a ese fin en la praxis de cada día.

 

En este sentido tendríamos que poner en primera línea, sin tapujos ni miedos nuestro modelo de Estado Federal Republicano y de reconocimiento del derecho de Autodeterminación; plantear el debate sobre la salida del euro y el rechazo de la Ley de Estabilidad Presupuestaria; Iniciativas orientadas al pleno empleo, mediante la reducción de la jornada laboral por ley; la nacionalización de sectores estratégicos de la economía; abordar el derecho a una vivienda digna para todos y todas; el acceso a la acumulación de la riqueza y su posterior distribución no dejándolo al llamado “libre Mercado”...

 

A nivel municipal y después de 2 años de gobierno hay cuestiones que no pueden dormir el sueño de los justos. Hace unos días, se publicaba una noticia que decía “Hacienda cambiara el valor catastral de los pisos para corregir injusticias”. Es decir, después de 5 años de denuncia sobre lo injusto y desproporcional del tema, con fuertes movilizaciones en nuestro municipio, es vital dar pasos para una verdadera y real revisión catastral aprovechando además la noticia a la que previamente hacía referencia. Además el tema del agua es una cuestión que llega al alma. Sin olvidar la apuesta por la red de centros cívicos, de bibliotecas y de su insonorización, por la industrialización sostenible en nuestro municipio, por la recuperación de nuestro patrimonio industria – absolutamente abandonado- , histórico y arqueológico - Grau Vell entre otros- , por derogaciones como la mal llamada “Ordenanza de Convivencia”; por la revisión del ROM; por una red de carriles bici aplicando mociones aprobadas respecto al proyecto “muévete en bici”; por la apuesta del traslado de la SAG a nuevos espacio , creando un centro de educación ambiental , además de su potenciación como Empresa Pública Municipal; Por el estudio de un transporte ferroviario que conecte por el centro neurálgico de la población Sagunto y Puerto; por recuperar reivindicaciones – se cedió el suelo a Conselleria- como la Creación de un Centro de día, Cris y una Residencia para personas con enfermedad mental ; por recuperar las movilizaciones para las infraestructuras educativas necesarias en el municipio; Por seguir apostando por la conexión ferroviaria con el Cantábrico; Por abordar nuevos modelos de participación en torno a los Presupuestos Participativos.

 

Hoy cuando la extrema derecha y los valores de la sustentan se abre camino en Europa. Cuando la insolidaridad, el individualismo, el racismo, la xenofobia, el sálvese quien pueda, producto de las diferencias sociales existente se asienta, las organizaciones y personas que nos reclamamos de la izquierda tenemos que dar respuestas para que el imaginario colectivo vea las soluciones desde nuestros valores y propuestas.

 

El que fuera premio nobel de la paz en 1952 Albert Schweitzer manifestó “El hombre se ha convertido en un superhombre...pero el superhombre con su poder sobrehumano no ha alcanzado el nivel de la razón humana. En la medida en que su poder aumente se convertirá cada vez más en un pobre hombre... Debe despertar nuestras conciencias el hecho de que todos nos volvemos más inhumanos a medida que nos convertimos en superhombres”.