La pasada semana llegó al Ayuntamiento de Sagunto una invitación con motivo de la celebración del Día de la Policía, un acto que ha tenido lugar hoy viernes 2 de octubre. Este acto, el cual merece todo mi respeto y todo, parece indicar que debería acudir por el cargo que represento, concejala delegada de Policía Local de Sagunto, viene envuelto de una serie de circunstancias por las cuáles, como persona de izquierdas, como mujer, y como representante pública, me impiden asistir.

La primera, ya en la frente, la apertura del propio acto con una “Misa solemne” en la Iglesia de Santa María, en Sagunto. Parece que a nuestras fuerzas de seguridad se les ha olvidado aquello de la separación Iglesia-Estado, una división que está profundamente arraigada en nuestro sistema jurídico. Tanto nuestro grupo municipal como el conjunto de Izquierda Unida rechazamos lo que entendemos que es un ilegítimo intrusismo a uno de los pilares, no sólo de nuestra organización, sino del propio Estado, la laicidad para la primera, y la aconfesionalidad para la segunda. Por coherencia tanto a mi organización como a los principios fundamentales de este Estado me veo (nos vemos) en la obligación de declinar la invitación que nos hace la Policía Nacional y, además de manifestar nuestra más absoluta disconformidad con esta práctica que esperemos que no se repita. Al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios.

La otra circunstancia que me impide asistir a esta celebración es la referencia al atuendo que debe llevarse en el acto de hoy, un “dress code” con el que no podemos más que sentirnos extraordinariamente insultadas por referenciar que las “señoras” deben vestir “vestido corto” mientras que a los “señores” se les permite acudir al Día de la Policía con “traje oscuro”. Esta recomendación que viene reflejada en la invitación es vejatoria y es una humillante discriminación que vulnera todas las leyes de igualdad de género que han sido publicadas hasta la fecha. Leyes que, pese a que son insuficientes, sí suponen una barrera para este tipo de conductas machistas.

Asimismo, siendo el feminismo otra de las líneas rojas de la organización a la cual pertenezco, no puedo más que manifestar mi más absoluta y reprochable condena ante la pretensión de vestimenta femenina. Aquello que cantaba Manolo Escobar de “no me gusta que a los toros te pongas la minifalda” ya forma parte, afortunadamente, de épocas pasadas y, por ello, confío que esta postura de no asistir hoy al acto sirva de referencia no sólo para el resto de mujeres, sino también para sentar un precedente en futuros actos, institucionales o no.

Y por cierto, no quisiera pensar que la recomendación a las mujeres de vestir de corto se ha plasmado ad hoc porque sea una mujer la que, hoy, ocupe el cargo de concejala delegada de la Policía Local de Sagunto.

Roser Maestro Moliner
Concejal delegada de Policía Local del Ayuntamiento de Sagunto