El pasado domingo 28 de mayo, el Ayuntamiento organizó de nuevo “El día de la Bici”, con un recorrido urbano que partió a las 10h de la C/ Jerónimo Roure, para subir hasta la Plaza Cronista Chabret de Sagunto, y terminar en la Plaza de la Concordia en la playa.

 

Podría dar muchos motivos para coger la bicicleta los días de la Bici, ya sea para asegurar el trazado que debe unirse, ya sea para disfrutar de la carretera sin coches, la increíble sensación de estar vacío de vehículos y minimizando riesgos; pero siempre me quedaría corta.

 

No es justificación que durante este Plan de Empleo vayamos a invertir 150.000€ en unir carriles bici, o en la creación de otros. Tampoco lo es que se trate de apaciguar el tráfico con reducciones de velocidad o campañas de concienciación. La realidad es que es necesaria una reivindicación en su conjunto, no podemos limitarlo a parchear cada cuatro años, esto se prolonga mucho más allá. Viene de lejos y va más lejos aún.

 

La cultura de la movilidad sostenible debe establecerse desde la infancia, ahí los padres y madres, así como los colegios tienen un papel vital. La participación de niños y niñas del domingo fue muy remarcable, más de la mitad lo eran, pero aún así faltaban muchos.

 

Respecto a la población adulta la concienciación es más complicada, estamos acostumbradas a coger el coche, y poder aparcar demasiado cerca de nuestro destino, ¿quién cogería la bici siendo así? Igual podría decir del autobús, o incluso de ir andando. Pero, ante esta situación, ¿qué hacemos?; quitamos la mitad de los aparcamientos para que salga a cuenta coger el autobús?, dificultamos la circulación con vehículos a motor por el núcleo urbano?, etc.

 

La verdad es que la conciliación de intereses es complicada, y este es un ejemplo más. Por ahora seguiremos uniendo carriles bici, seguiremos aumentando los Caminos Escolares Seguros, seguiremos aumentando las ZONAS 30, seguiremos mejorando el servicio de transporte público, y seguiremos concienciando hasta la saciedad. Desde niños y niñas, hasta la población más anciana.

 

Algo sí está claro, queda mucho trabajo por hacer, y más cuando se refiere a la movilidad en bicicleta. Así que emplazo desde ya para reunirnos en el día sin coche (septiembre), momento en el que espero duplicar las asistencias, (especialmente de niños y niñas), y duplicar recorrido y premios.

 

Hagamos una ciudad más sostenible, más cercana y más humana.