Ante las elecciones del 26J es importante, volver a hablar del voto de todos aquellos y aquellas que por diversos motivos han tenido que emigrar y a los cuales el 20D no les permitieron o dificultaron en una gran medida que pudiesen ejercer su derecho democrático del voto, lo que indica que a alguien el que ese voto se pudiera producir no le interesa.

 

Por eso hay que reclamar, ahora que se ha dado el pistoletazo de salida al proceso electoral, al Presidente del Gobierno en funciones, a los ministros de Asuntos Exteriores, Economía y del Interior, así como a la Junta Electoral Central, Defensora del Pueblo y partidos políticos, que se garantice el ejercicio efectivo del derecho al voto de los emigrantes y se tomen todas las medidas necesarias para que los/as españoles/as residentes en el exterior puedan participar, en igualdad que el resto de los ciudadanos/as, en las próximas elecciones generales del 26 de Junio del 2016.

 

Desde, mi humilde opinión, y viendo lo ocurrido en las pasadas elecciones del 20 de diciembre del 2015 hay que no solo instar sino también exigir al Gobierno que facilite el ejercicio de este derecho fundamental y a suprimir los obstáculos que impidieron el voto exterior en la pasada convocatoria, como he indicado anteriormente.

 

Asimismo, es imprescindible que tras las elecciones del 26 de junio de 2016 se deroguen de manera inmediata las normas legales que establecieron el voto rogado e impiden el ejercicio efectivo del derecho a la participación política de la emigración. La composición del Parlamento debe reflejar también las preferencias políticas de la ciudadanía española en el exterior, democráticamente expresadas.

 

Por último indicar, sobre este asunto , que los partidos políticos y la comunidad deberían pedir y exigir a la Administración para que, ante la convocatoria de elecciones generales para el 26 de junio próximo, los ministerios participantes en la gestión del voto del exterior actúen coordinadamente y no se repitan las irregularidades habidas en las elecciones del 20 de diciembre de 2015.

 

El libre ejercicio de los derechos políticos de los emigrantes debe garantizarse y ello exige de la Administración subsanar las deficiencias, eliminar los obstáculos, agilizar los procesos y habilitar los recursos técnicos y humanos necesarios, de modo que la participación electoral en el exterior se realice con todas las garantías democráticas.

 

Me faltaría indicar, ante este tema, que los partidos políticos que concurren en esta nueva contienda electoral deben asumir en sus programas electorales el compromiso de que se restaure el derecho al voto en la emigración sin que sea necesario rogarlo, lo que significa reformar la LOREG en ese sentido en la nueva legislatura.

 

Mientras tanto, y ante este nuevo proceso electoral, debemos reclamar al gobierno que se garantice el ejercicio efectivo del derecho al voto de los emigrantes y se tomen todas las medidas necesarias para que los/as españoles/as residentes en el exterior puedan participar en igualdad que el resto de los ciudadanos, en las próximas elecciones generales de 26 de junio de 2016.

Ximo Estal Lizondo
Sindicalista de CCOO del Camp de Morvedre y Alto Palancia